La pesadilla de Freddy

Uno, dos... Freddy viene por ti; tres, cuatro... cierra la puerta; cinco, seis... toma el crucifijo; siete, ocho... mantente despierta; nueve, diez... nunca más dormirás!

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Seguramente usted ha visto a ese personaje con suéter de rayas, sombrero negro, cuchillos en su mano izquierda y quemaduras en todo su cuerpo, seguramente sabe que se llama Freddy Krueger y seguramente a visto su película, "Pesadilla sin fin". Pero apuesto a que jamás se ha preguntado cuál es la historia que inspiró a Wes Craven a crear esta película de terror.

Volvamos al año 1975 en Camboya. Los Jemeres Rojos, liderados por Pol Pot, apenas se instalaban en el poder luego de la Guerra Civil Camboyana que derrocó a Lon Nol. Acontecimiento que provocó  múltiples cambios, como el de la economía, en el que el nuevo gobierno pretendía volver a centrar los ingresos en elementos tan básicos como la siembra de la tierra.

Como muchos de ustedes saben esto no terminó bien. Los Jemeres Rojos optaron por instaurar una dictadura llamada Kampuchea Democrática, que terminó con la muerte de aproximadamente 1,8 millones de Camboyanos a causa de las hambrunas, las ejecuciones políticas o los trabajos forzados a los que eran sometidos.

Lo curioso del caso es que el régimen utilizaba campos de concentración similares a los de la Alemania nazi. A estos campos se les bautizó como "Los campos de la muerte en Camboya" y eran los lugares en los que permanecían los civiles antes de ser asesinados con veneno, espadas o troncos afilados de Bambú.

Algunos de los camboyanos lograron escapar de los campos de la muerte y se fueron como refugiados a otros países, hasta ahí todo bien. Sin embargo, estos refugiados empezaron a sufrir el síndrome de la muerte nocturna inesperada ¡aquí es donde surge la relación directa con la enigmática película de terror!

Este síndrome atacó cerca de 100 hombres entre los 25 y los 55 años, quienes se quejaban constantemente de sentir pánico o miedo extremo, parálisis parcial o total del cuerpo, perturbación de los sentidos y la presencia de un ser extraño hasta que finalmente fallecieron mientras dormían.

Los que lograban volver a la vida aseguraban que tenían pesadillas constantes con los campos de la muerte, a veces veían el asesinato de sus seres queridos y otras veces el propio. Se despertaban con rasguños y con la idea de no volver a dormir para no volver a soñar.

Tanto fue el impacto de este episodio que muchos de los hombres camboyanos preferían vestirse como mujer al dormir para despistar a ese ser extraño que los visitaba antes de arriesgarse a morir. Pero ¿por qué de mujer? Pues porque las mujeres no se vieron afectadas por este síndrome, pero si tuvieron que enterrar a muchos de sus hombres por culpa de él.

Esta macabra historia fue la que sirvió para construir la trama de pesadilla sin fin, esa película de 1984 que nos dejó con la idea de no dormir jamás.