Una criatura o figurilla extraña de los Chibchas que habitaron el altiplano cundiboyacense, es la historia con la que se abrirá paso a nuestra sección "Mitos Colombianos". Pero como toda historia popular, se han narrado versiones...
La primera y menos conocida, es en la cual se dice que el Tunjo es una figurilla de oro creada por hombres especiales de las familias indígenas del altiplano, quienes se esforzaban tanto, especialmente los detalles en el rostro, que incluso sorprendían por la semejanza con un humano.
Ilustración de "El Tunjo"
Se decía que los Tunjos guiaban a los mensajeros que recorrían grandes distancias para intercambiar productos como sal o cobijas. Aunque los Tunjos no eran solo guías, también servían de oyentes de las historias que los mensajeros les contaban durante el recorrido, por lo que terminaron siendo los confidentes de los mensajeros.
De tantas historias que el mensajero contaba, se dice que las figurillas de oro cobraban vida, para lo cual, en el momento que comenzaran a hablar con el mensajero, él debía abandonarlas en el camino para que el Tunjo siguiese su propio destino y ayudara a guiar a otros viajeros.
Altiplano cundiboyacense.
Luego de la llegada de los españoles a nuestro continente, las costumbres de las poblaciones indígenas sufrieron grandes transformaciones culturales, entre ellas se dice que quedó en el olvido el conocimiento sobre los poderes del Tunjo y de su valioso significado para los mensajeros y viajeros.
Algo que se pudo observar cuando, en el afán de la codicia de la época de la conquista, las personas pasaban por los caminos buscando las figuras, quienes en su afán de encontrar los valiosos Tunjos, recibían burlas o sustos por parte de los Tunjos, pero jamás lograban encontrarlos en los caminos.
Así concluye la primer historia de "El Tunjo" por ahora, próximamente estaremos publicando la versión más reciente sobre esta valiosa figurilla.